jueves, 5 de enero de 2012

De cómo lo más conocido se desvanece

Luego de leer y releer las palabras me imagino el instante bajo el que nacen.
Una tarde feliz o un día lluvioso, pero nunca de mañana, porque al despertar el día, todo parece nuevo, uno espera que siempre vuelva a empezar la vida. Y si desperdiciamos el día de ayer, el nuevo será distinto. Sin embargo, cuando llega la noche lo único que puede salvarnos es lo que escribimos, así el día deja de escurrirse y se puede pensar en él como algo mejor, un día que no pasó así nomas, un día con referencia, una marquita que nos separa de la muerte cotidiana.

No tengo que decir que estoy triste, pero lo digo, porque no quiero contagiar a nadie o quizá viceversa, estoy jodidamente triste.

Sin embargo, entre los gritos al otro lado del teléfono puedo agradecer que alguien me escucha.

Gracias Vik.

1 comentario:

  1. mmm, pues de estos nuevos pensamientos que escribiste me llegó más el del "sentido", esa frase tuya es tan cierta que da risa nerviosa: ja...ja...ja...? "NOS FASCINA ESCOGER LO QUE MÁS NOS CHINGA", cierto no sólo para mí, creo (seguramente) que yo también chingo ups., eso duele. TE QUIERO PEQUEÑA, HASTA SIEMPRE

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